Pete Hines, el vicepresidente de Bethesda, ha desvelado que multitud de productoras cinematográficas se han interesado por sus licencias, pero nunca han aceptado por temor a que las películas resultantes no estuviesen a la altura.
Los temores de Bethesda
"¿Vamos a dejar que otra persona haga su propia interpretación de lo que es Fallout, The Elder Scrolls o Dishonored? ¿O vamos a dejar que los desarrolladores sean los únicos que puedan decir: 'Esto es Fallout, o Elder Scrolls, o Wolfenstein o lo que sea'?", comentó Hines.
"Queremos que nuestros desarrolladores decidan qué son nuestras sagas y no una director de cine, productor o estudio. Creo que si Peter Jackson viniese a la oficina de Todd Howard (director de The Elder Scrolls y Fallout) y dijera 'quiero hacer una película de Elder Scrolls', bueno, eso sería una conversación muy seria que tendríamos que escuchar. Pero creo que Peter está probablemente muy ocupado (risas), así que no creo que hagamos películas hasta dentro de mucho".
Por otra parte, Hines también comentó que no le convence demasiado el hecho de que un estudio les prometa mantener total control creativo sobre un proyecto de estas características: "No conozco a nadie que haya tenido total control creativo sobre la adaptación cinematográfica de su videojuego. Si lo tuvieses, ¿por qué no la haces tú mismo?"
"Por supuesto, el estudio, el guionista y el director van a tener mucho que decir. Tendrán su propia visión. Así que nos tendrían que estar preguntando todo el rato, pero vemos eso como una distracción. Somos una compañía de videojuegos: vamos a hacer lo que sabemos", concluyó.
