Las reservas de Call of Duty: Ghosts son más bajas que en el último juego, Call of Duty: Black Ops 2. Activision lo ha reconocido a sus accionistas y Eric Hirshberg culpa de ello a la indecisión de los jugadores y la llegada de las nuevas consolas, PlayStation 4 y Xbox One.
"Como se podría esperar en este año de transición, las reservas de Call of Duty: Ghosts están muy por debajo del récord de Black Ops 2 en el año pasado".
"Sin embargo, nuestros estudios indican que las dudas entre los usuarios se debe principalmente a que no saben en qué plataforma lo jugarán, lo que es natural en este periodo".
Hirshberg afirma que Activision tiene la "campaña de marketing más agresiva en la historia de la saga. Se han hecho inversiones para hacer Ghost un espectáculo para las nuevas consolas y el mejor Call of Duty en las consolas actuales".
