Es que el inicio es brutal, pantalla en negro, silencio, unas palabras en color blanco sobre ese fondo negro, "Nintendo presenta", "The Legend of Zelda", "Breath of the Wild", simple y elegante, estás ante algo gordo, se palpa. A una luz le sigue una voz que después será muy familiar y trascendente, la voz de Zelda, nos despierta, Link se levanta y damos nuestros primeros pasos en ese extraño entorno cerrado de aspecto casi alienígena, seguimos las primeras indicaciones en pantalla, nos movemos, nos vestimos y salimos del santuario de la vida al exterior, solo es el principio y empieza el momentazo, Link aproximándose hacia el borde de la colina mientras se aleja la cámara y suena la música con el personaje oteando el horizonte ante la inmensidad de Hyrule, la aventura que nos espera.
Abre los ojos... Despierta... Link.