Tras la enorme polémica provocada por el escándalo de las apuestas ilegales de Counter-Strike: Global Offensive, en el que se descubrió que youtubers estaban promocionando webs de apuestas en las que tenían participación, Valve Software ha decidido tomar cartas en el asunto.
La compañía americana, responsable tanto de Counter-Strike: Global Offensive como de la plataforma Steam, ha dicho que impedirá que los sitios de apuestas de CS:GO usen la API de Steam para sus actividades. La compañía americana también ha negado tener relación con estas webs, o beneficiarse económicamente de sus actividades, que estiman que generan 2.700 millones de dólares al año.
Valve estima que esos sitios de apuestan están violando los términos de uso de la API de Steam, por lo que les enviará cartas pidiéndoles que cesen sus actividades.
La compañía americana ha sido demandada por supuestamente apoyar estas actividades, acciones legales que han cobrado fuerza después de que se descubriese que los youtubers Trevor "Tmartn" Martin y Tom "ProSyndicate" Cassel promocionasen una web de la que eran partícipes sin que lo avisasen previamente.
