La última semana ha sido muy intensa para los amantes del Counter-Strike gracias al PGL Krakow Major 2017, el segundo Major del año del FPS de Valve organizado en esta ocasión por PGL que ha tenido un resultado que difícilmente podrían haber esperado los analistas y aficionados al CS:GO cuando el torneo se inicio el pasado domingo 16 de julio.
Y es que el torneo nos dejó muchas sorpresas como la clasificación a los playoffs de BIG, la caída por la vía rápida de FaZe y, sobre todo, con una final bastante inesperada entre Gambit e Immortals que nos vuelve a demostrar que en este 2017 los equipos de CS:GO están más apretados que nunca.
La final comenzaba muy bien para los brasileños con un Cobblestone en el que no tuvieron rival y que se llevaron por un 4-16 que hacía temblar al público que tenía una clara preferencia por Gambit que gracias al aliento del público y al talento de sus jugadores lograba empatar la final en Train venciendo a Immortals por 16 a 11.
El tercer y último mapa tendría lugar en Inferno y en él Gambit contaba con algo de ventaja al comenzar en el lado CT, algo que supieron aprovechar a la perfección para adelantarse por 11-4 en la primera mitad del mapa para acabar cerrando la final por un 16:10 que les hacía campeones de este segundo Major del año.
Tras esto, fue emocionante ver el salto, la emoción de todos los jugadores de Gambit. El equipo había tenido buenos momentos en los últimos meses pero para ellos, y para la mayoría de los aficionados era difícil de creer que pudieran ganar este segundo Major del 2017 de CS:GO.
En especial fue tierno ver a un Zeus que después de que Natus Vincere decidiese dejar de contar con él decidió no rendirse, volver a levantarse y formar un gran equipo de talla mundial con el que ha conseguido levantar el trofeo más importante del FPS de Valve a nivel mundial.
