Análisis de F1 2018 (PS4, Xbox One, PC)

Codemasters lleva años puliendo cada detalle de la franquicia F1 para ofrecer a los aficionados la recreación más fiel de la competición tanto dentro como fuera de la pista. En esta ocasión no estamos ante un título revolucionario, pero encontramos cambios muy interesantes en la jugabilidad, un modo carrera más profundo, una Superlicencia para los modos online, nuevos monoplazas clásicos y el campeonato mundial actualizado. Sin duda, los amantes de la Fórmula 1 van a disfrutar de la experiencia más realista e inmersiva de los últimos años.

Categoría reina

La base jugable se mantiene prácticamente intacta respecto a su predecesor, lo que garantiza un avanzado sistema de físicas y un control muy pulido, siendo capaz de adaptarse a todo tipo de jugadores según el nivel de la IA y las ayudas. En este sentido, Codemasters ha mejorado sutilmente el comportamiento de los rivales, encontrando en los niveles de dificultad más elevados un pilotaje más agresivo tanto para adelantar como para mantener la posición, aunque a veces sobrepasan los límites de la legalidad. En lo que respecta a las ayudas, tendremos libertad para hacer la simulación más o menos realista con ajustes como el cambio automático, la trazada dinámica o los flashbacks.

Entre las novedades más destacables se encuentra un nuevo sistema de suspensión que, aunque no supone un cambio muy evidente, ofrece un feedback más preciso del monoplaza, apreciando con mayor detalle el estado de la pista, los pianos o la degradación de los neumáticos. Además, en F1 2018 existe la posibilidad de manejar manualmente el ERS (Energy Recovery System) , contando con cinco modos diferentes que influyen de manera directa en el rendimiento del vehículo.

A nivel jugable, el resto de la experiencia es continuista, disfrutando con un control preciso, multitud de elementos de configuración para el vehículo, una enorme variedad de comandos para hablar con boxes y un interesante sistema de daños visuales y mecánicos, aunque en determinadas situaciones ofrece comportamientos poco creíbles. Por último, el control con el volante sigue siendo sobresaliente, volviéndose un complemento imprescindible para aquellos que quieran una experiencia realista.

La vida de un piloto

El modo carrera ha vuelto a dar un paso hacia delante incluyendo una recreación más detallada de todo lo que sucede fuera de la pista, algo que llevábamos años pidiendo y que le ha sentado muy bien. La principal novedad es que vamos a tener que interactuar con la prensa mediante un sistema de respuestas que afectará a nuestra personalidad y a la relación que tengamos con los diferentes departamentos de la escudería. Es cierto que las preguntas y respuestas son muy básicas, pero consiguen una buena implicación y afectan ligeramente al avance.

En este sentido, F1 2018 incluye el clásico sistema para mejorar el monoplaza, contando en esta ocasión con árboles de desarrollo personalizados para cada equipo. De esta forma, a medida que vayamos consiguiendo puntos según nuestro rendimiento podremos ir optimizando el coche a nuestro gusto. Para potenciar este apartado también se incluye un sistema de rivalidad que, no solo nos enfrenta a nuestro compañero de equipo, sino que también nos permite elegir a un rival adicional, obteniendo más o menos beneficios y castigos según nuestra ambición.

Nuestro rendimiento en pista y las decisiones que tomemos se verán reflejadas constantemente mediante dos indicadores: el primero marca nuestro nivel de experiencia, algo que iremos aumentando participando en las diferentes sesiones, cumpliendo retos y disputando pruebas especiales con vehículos clásicos; por otro lado, nuestra personalidad se irá modificando según las respuestas que vayamos dando, un factor determinante a la hora de firmar nuevos contratos. Sin duda, las novedades del modo carrera no son una revolución, pero han conseguido dar mayor profundidad a un modo que poco a poco se ha ido convirtiendo en la experiencia más inmersivas e interesante.

Variedad de opciones

El resto de modos de juego siguen siendo los habituales: Gran Premio, Contrarreloj y Campeonatos, pudiendo en todos ellos elegir entre monoplazas clásicos y modernos, así como configurar multitud de ajustes para conseguir una experiencia a nuestra medida. En este sentido, no se incluyen opciones multijugador a pantalla partida, lo que supone una ausencia destacable.

En las modalidades online competitivas se ha implementado la Superlicencia, un nuevo sistema de clasificación que tiene en cuenta nuestro rendimiento y deportividad, algo imprescindible para garantizar partidas igualadas. Su uso ha demostrado ser muy acertado y nos ha permitido disfrutar de una comunidad online bastante más respetuosa, aunque habrá que esperar un tiempo para comprobar su verdadera efectividad.

Entre las opciones online encontramos Campeonatos y Carreras con y sin clasificación, modos que dan cabida hasta 20 jugadores simultáneos y en los que disfrutamos de las carreras más competitivas. Por último, también podemos participar en eventos temporales online en los que se recrean situaciones concretas y donde nuestro objetivo es obtener la mayor puntuación posible.

El último año de Fernando Alonso

F1 2018 llega completamente actualizado a la presente temporada en lo que respecta a coches, circuitos y pilotos. Los monoplazas de las diez escuderías han sido perfectamente recreados a nivel visual y técnico, destacando el gran trabajo realizado para equilibrar el rendimiento de toda la parrilla. Por su parte, los 21 trazados oficiales de la temporada cuentan con un acabado sobresaliente, incluyendo la incorporación del GP de Francia en el circuito de Paul Ricard y del GP de Alemania en Hockenheimring. Además, se incluyen cuatro variantes especiales y la posibilidad de modificar libremente la hora del día y la climatología.

Otra de las grandes novedades es la incorporación de ocho nuevos vehículos clásicos, destacando la presencia de coches emblemáticos como el McLaren M23D de 1976, el Brawn GP-001 de 2009 o el Lotus 79 de 1978. A estos les debemos unir los doce ya existentes, completando así un catálogo de veinte monoplazas antiguos, todos ellos recreados con un enorme rigor histórico tanto a nivel visual como de rendimiento, lo que garantiza una experiencia realmente exigente.

El Gran Circo

La recreación audiovisual de la Fórmula 1 sigue estando a un gran nivel, destacando el perfecto modelado de monoplazas y circuitos, así como una reproducción muy detallada de las diferentes condiciones climatológicas y temporales. En este sentido, la meteorología ha mejorado su representación visual gracias a cambios importantes en el sistema de iluminación y en la generación de nubes, lo que aporta mayor realismo. Por su parte, el sistema de daños visuales no ha mejorado significativamente y los desperfectos son muy básicos.

También la sonorización de los monoplazas está a un gran nivel y consigue transmitir una enorme información durante las carreras. Por su parte, la banda sonora es solvente, aunque no destaca por su buena selección de temas. Por último, el videojuego está doblado al castellano y, aunque las interacciones son por momentos muy poco creíbles, se han adaptado todas las retransmisiones, añadido comentarios desde boxes e incorporado multitud de líneas de diálogo para las entrevistas.

Técnicamente F1 2018 alcanza con gran estabilidad los 60 fotogramas por segundo, tasa que garantiza una sobresaliente experiencia jugable y que solo cae puntualmente durante algunas cinemáticas. Sin embargo, el sistema de animaciones vuelve a ser muy limitado y la repetición de situaciones durante las retransmisiones empaña una realización televisiva actualizada y bastante dinámica.

Conclusión

F1 2018 sigue la exitosa senda que la franquicia ha marcado durante los últimos años y ofrece una experiencia muy realista que recrea lo que sucede dentro y fuera de la pista. Para ello contamos con una jugabilidad muy depurada que podremos ajustar mediante multitud de parámetros, consiguiendo con ello adaptar la experiencia a todo tipo de jugadores. Además, hay una enorme variedad de modos que garantizan muchas horas de diversión, destacando las novedades del modo carrera y la inclusión de una Superlicencia para regular el multijugador online competitivo.

Por último, debemos insistir en la completa actualización a la presente temporada de pilotos, monoplazas y circuitos, así como la incorporación de nuevos vehículos clásicos. Sin duda, F1 2018 es todo lo que esperábamos y se convierte por méritos propios en uno de los mejores títulos de la saga.

Hemos realizado este análisis en su versión para PS4 Pro con un código de descarga proporcionado por Koch Media.