Análisis de Pro Evolution Soccer 3 (PS2, PC)

La inteligencia artificial sigue siendo impresionante y se ha mejorado aún más en este juego, eliminando cualquier truquito de correr mucho con la estrella de turno y obligándonos a jugar al fútbol, tocando el balón, internándonos, buscando el desmarque... Como novedad de la inteligencia artificial, ahora el equipo rival se va acostumbrando a nuestra forma de jugar y va pillando nuestros vicios en ataque y defensa; así, cada vez nos costará más atacar de la misma forma y por la misma zona, y si abusamos de la defensa doble nos podemos llevar una sorpresa muy poco grata y encomendarnos a nuestro portero. Un portero que, por cierto, ha visto mejorada su inteligencia artificial. Hay otros cambios y novedades interesantes; por ejemplo, ahora el árbitro aplicará la ley de la ventaja lo que es un avance considerable en los juegos de fútbol ya que se aplica bastante bien; otra novedad curiosa es que ahora pitarán las manos. En esta versión europea se ha cambiado alguna que otra cosa en la jugabilidad, equilibrando más el juego (al estilo de los Virtua Fighter) y por lo tanto haciendo que, por primera vez, la versión occidental supere al original.

Los modos de juego siguen siendo uno de los puntos fuertes de PES, algunos de ellos bastante curiosos como la posibilidad de jugar con un solo jugador durante todo el partido, al estilo del Libero Grande de Namco (pero con la vista normal, por supuesto). Aparte de los modos amistoso y entrenamiento (cuyo modo desafío ha mejorado notablemente, haciéndose muy adictivo), tenemos varios modos de copa (y la posibilidad de diseñar la nuestra), pero el modo más importante vuelve a ser el Master League, dividida esta vez en cuatro divisiones. Como no hace falta explicar, en la Master League empezaremos con nuestro equipo favorito en lo más bajo, con unos jugadores tremendamente mediocres, y tendremos que hacerlo subir a lo más alto a base de buena gestión y victorias. Además de la liga, participaremos en competiciones entre ligas análogas a la Copa de la Uefa y a la Champions League. Se ha profundizado más en el sistema de gestión, en la negociación de fichajes y en el entrenamiento de jugadores. Cabe destacar que para siquiera intentar fichar a los mejores jugadores, nuestro equipo tendrá que tener una buena cantidad de títulos en sus vitrinas.

Otra curiosa novedad son los puntos PES, que recibiremos en varios modos de juego, y que podremos utilizar para comprar mejores en la Tienda PES, tales como modos de juego especiales, la opción de escuchar las músicas del juego, y lo que es más importante, la opción de traspasar jugadores que nos servirá para actualizar las plantillas y para crear equipos de ensueño. Como en prácticamente todo el resto del juego, el editor de jugadores y equipos también ha sido ampliado y mejorado, especialmente el primero, pudiendo elegir entre una centena de caras y numerosos peinados y modificarlas a nuestro gusto, cambiando las dimensiones del rostro, el color de los ojos, del cabello, etc... Podemos crear, y de hecho circulan por internet "instrucciones", los rostros de los jugadores que no han sido incluidos en el juego por problemas de licencia como los de la selección holandesa.

Como conclusión, decir simplemente que Pro Evolution Soccer 3 es el mejor juego de fútbol de PlayStation 2, algo que por otra parte ya todo el mundo sabía. Su perfecta jugabilidad, los sensacionales gráficos y la cantidad de horas de diversión que proporciona tanto en solitario como hasta a ocho jugadores lo convierten en uno de los mejores juegos del catálogo de PlayStation 2. Solo destacaría tres cosas negativas que son las únicas que tiene que retocar Konami para futuras entregas: la primera, las licencias, la eterna asignatura pendiente que tampoco es que dependa completamente de Konami, pues la exclusiva es de Electronic Arts; la segunda, el sonido, que queda completamente en evidencia ante la nueva entrega de FIFA; y la tercera, y esperada por todos, especialmente por nosotros, la "gente Online", el modo multijugador a través de la red. Esperemos que Konami Tokio no nos defraude en esto último; tendremos que esperar doce meses para comprobarlo y para exprimir todo el jugo del mejor simulador de fútbol nunca hecho.